Jurídico y financiero

La traducción jurídica exige precisión absoluta: cada palabra cuenta y no puede dar lugar a interpretaciones erróneas; es necesario que el traductor comprenda los conceptos legales que maneja, y que sea capaz de expresarlos por medio de la terminología apropiada en su propia lengua. Estos complejos retos que plantea la traducción jurídica sólo se pueden afrontar con la formación de equipos expertos y la implantación de estrictos procesos de control de calidad en la gestión de cada traducción que realizamos.


Por ello, en general los traductores de Techlingua son abogados inscritos en los respectivos Colegios Oficiales de Abogados. En todos los casos, sus traducciones jurídicas serán confiadas a profesionales con estudios de Derecho o con una larga experiencia en este ámbito, que dominen perfectamente la terminología utilizada.


A diferencia de los textos generales, que admiten una mayor flexibilidad a la hora de traducirlos, los documentos financieros requieren una precisión lingüística que sólo los profesionales en el mundo de las finanzas y la empresa pueden conseguir.


Techlingua ayuda a las principales consultoras financieras y despachos de abogados a alcanzar sus objetivos comerciales mediante la traducción de:

  • Contratos mercantiles
  • Documentos Societarios
  • Propiedad industrial e intelectual
  • Banca y seguros
  • Documentos relativos al Derecho Laboral, Civil, Penal, Inmobiliario
  • Documentos procesales
  • Documentos Administrativos
  • Documentos de M&A / Joint Ventures
  • Memorias y Cuentas Anuales
  • Folletos de emisión
  • Boletines bancarios
  • Informes de Auditoría
  • Informes Contables
  • Informes semestrales y anuales de fondos
  • Actas de Juntas Generales de Accionistas